Solothurn es una histórica ciudad situada a los pies del Jura, a la orilla izquierda del río Aare. En su casco antiguo conserva una noble fisionomía arquitectónica, con edificios renacentistas y barrocos. Las calles son estrechas con cerradas sucesiones de casas de tejados salientes y plazas de forma irregular. Es una de las posibles localidades que visitar desde Basilea.
Qué ver en Solothurn
Entre las muchas cosas que se pueden ver en Solothurn hay que destacar la puerta de Biel/Bienne. Se levantó hacia la mitad del siglo XVI y se modificó en el siglo XIX. Señala el acceso desde el oeste al casco antiguo de la ciudad, todavía encerrado dentro de la muralla defensiva del siglo XVII. Al este el acceso viene dado por la Baseltor, la puerta de Basilea, que se abre entre dos torres redondas de 1535.
En el corazón del casco antiguo se encuentra la Marktplatz o plaza del Mercado. Está adornada por la Ursenbrunnen (fuente de San Urso), de mediados del siglo XVI. Domina la plaza la Zeitglockenturm, la torre del Reloj, que cuenta con una cúspide curvada levantada durante el siglo XII y realzada durante el siglo XV. La torre presenta un reloj astronómico de 1545, que mueve una serie de autómatas: el guerrero, la muerte y un rey con cara de gnomo. Una inscripción en latín ensalza a Solothurn como la ciudad celta más antigua después de Tréveris.
Catedral y Ayuntamiento
La catedral de San Urso (St. Ursenkathedrale), dedicada al mártir tebano, patrono de la ciudad. Se construyó entre 1762 y 1773 en estilo barroco italiano por los ticineses Gateano y Paolo Pisoni, tanto en la fachada de dos órdenes, de nobles y vigorosas formas clasicistas, como en el interior, de tres naves con fuertes pilastras y elegante cúpula. La sacristía conserva un valioso tesoro con importantes manuscritos, orfebrería, objetos y ornamentos sacros de los siglos X al XII.
El Ayuntamiento (Rathaus) es originario de 1476 aunque ha sufrido diversas modificaciones y ampliaciones con el paso del tiempo. La fachada oriental presenta una bella decoración renacentista y también una torre en escalera rematada por una aguja.
Frente al Kunstmuseum (Museo de Arte) podremos ver la Riedholzturm. Es una de las torres redondas que se levantan en el casco antiguo de Solothurn. Data de 1548 y está armada con un poderoso bastión construido en 1667 por Francesco Polatta. Al oeste también puede verse la Buriturm, una torre construida en 1534.